La familia es un pilar básico de la sociedad, queridos hermanos. Es el cemento de la cohesión afectiva y económica entre generaciones. Ya sé que a los que tenéis una cierta edad os resultará extraño leerme decir esto porque os habréis educado en los dogmas de nuestra iglesia primitiva que nos enseñaban que la familia era un engranaje más de explotación patriarcal y alienación individual contra el que debíamos combatir. Decían entonces nuestros textos sagrados y nuestros no menos sagrados patriarcas que el amor libre acabaría con la nefasta institución, y los vástagos de ese amor universal serían educados por el estado protector en una nueva sociedad sin explotación ni familiar ni de clases. Gentes de una edad provecta como la exministra Celáa aún decían hace dos días que los hijos no son de los padres sin duda recordando lo que aprendieron en su catecismo infantil. Pero pronto se desveló cuánto de utopía tenía esta visión del futuro, pues los lazos afectivo- posesivos se mostraron difíciles de erradicar, baste de ejemplo la trágica venganza de nuestra madre Dolores Ibarrurri contra su amante Francisco Antón por abandonarla, no en pos de un amor libre, sino de una simple relación binaria con una camarada más joven llamada Carmen. El dogma primigenio, pues, fue cayendo en el olvido, y la familia tradicional dejó paulatinamente de ser contestada, incorporándose a ella con entusiasmo en los tiempos actuales los más variados elementos procedentes de la comunidad genérica (de género, quiero decir). Nuestra iglesia, fiel al mandato de la sociedad, ha decidido pues apostar por el fortalecimiento de la institución y favorecerla con todas las medidas a su alcance. Y el primero, como no podía ser de otra manera, nuestro presidente. Nada más llegar al poder, su esposa fue contratada por una empresa declarándose su salario secreto de estado, y el año pasado la Universidad Complutense creó una cátedra de la que la nombró titular a pesar de que la señora no es ni licenciada. Siempre dentro de la familia Sánchez-Pérez, la empresa del padre del presidente fue agraciada con un millón de euros de subvención pública. Finalmente, el hermano del presidente, fue contratado por la Junta de Extremadura para coordinar dos organismos musicales, cerrándose así por el momento el ciclo de la protección familiar de nuestro Primus inter Pares. Pero a veces la familia sobrepasa los meros lazos de sangre, y hay amistades de carácter fraternal, como la que unía al presidente con un colega de instituto para el que creó expresamente una dirección general de Arquitectura. Todos los miembros de nuestra comunidad se han esforzado en la aplicación de la doctrina tanto en el pasado como en el presente. El primero fue nuestro patriarca Alfonso Guerra, a cuyo hermano Juan, se le puso un despacho en la Junta de Andalucía sin más mérito que el del parentesco. Y ya, a partir de ahí, todos se han esforzado por imitar su ejemplo: Al hermano del presidente andaluz Rodríguez de la Borbolla le van a juzgar por 8 millones de euros de subvenciones;la empresa de la hija del también presidente andaluz Chaves, ha sido obligada a devolver 10 millones de subvenciones irregulares, amén de las diversas colocaciones de los cuatro hermanos del presidente;los dos hermanos y el hijo del presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig también regados con subvenciones que están siendo investigadas; el exvicepresidente Iglesias colocando de ministra a su pareja, o la esposa del candidato a la Junta de Andalucía, Juan Espadas, que interrogada en el parlamento andaluz sobre su empleo en la Junta, no supo explicar en qué consistían sus funciones… La incorporación de la mujer al mundo de los altos cargos hace que sea ella ahora quien desempeña también el rol de protección familiar y aparece la figura del esposo favorecido. Así, tenemos investigado en estos momentos al esposo de la Directora de la Guardia civil o las subvenciones recibidas por la empresa del esposo de la Vicepresidenta Nadia Calviño.Item el esposo de la Presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz,que de simple administrativo, pasó a cobrar de UGT en concepto de “tutor, evaluador y preparador” de los famosos cursos de formación del sindicato por lo que fue investigado. O la ministra Belarra, que al llegar al cargo colocó de asesor a su pareja. Pero quien se lleva la palma y es mi favorita, es la alcaldesa de Móstoles, Noelia Posse, que en lugar de dedicarse solamente a las empanadillas, colocó en la corporación: a su tío de Director Técnico Administrativo; a su hermana, de responsable de redes sociales, cargo de nueva creación; a su expareja de Supervisor del Grupo de Intervención Especial del Ayuntamiento; a su cuñado, y finalmente, a una amiga de la infancia (no pongo los cargos para no aburrir). De esta forma, le arrebató el título de protección familiar al exministro Ábalos, que hasta entonces lo ostentaba, pues éste había dado trabajo al llegar al cargo a su suegro, su mujer y un sobrino. No sólo nosotros aplicamos estas políticas de protección familiar. También en el exterior nos iluminan con su ejemplo los hermanos Castro, en Cuba; Cilia Flores, esposa de Maduro colocando en puestos estatales a 30 parientes, destacando su sobrino Carlos Malpica Flores como Vicepresidente de Petróleos de Venezuela, o a la familia de Daniel Ortega en Nicaragua, que nombró canciller a su esposa y asesores presidenciales a cuatro de sus hijos, el mayor con rango de ministro para llevar las negociaciones con Rusia y China, o a Máximo, el hijo de Cristina Fernández de Kirchner quien ocupó el cargo tras Néstor, su marido, etc, etc, etc. Se me podrá objetar que no cito las medidas de protección familiar de otras cofradías. Es cierto, sin duda existen, pero no son de mi negociado. Lo que no consigo entender es el revuelo armado por la sospecha de que un hermano de la presidenta de la comunidad de Madrid haya podido hacer lo mismo o parecido…Esto es un asunto que no debería admitir sesgos ideológicos, si es de justicia proteger a la familia, debemos batirnos por ello no importa cuál sea el campo en que se produzca. Digamos todos a coro, ¡Loado sea el señor que pone en nuestras manos abundantes medios para proteger a los nuestros!. Amén.