Pícaros

Triunfaba en España por los años 70 un tipo de cine que, aún sin haberlo visto, a mí me avergonzaba. Las carteleras mostraban a Andrés Pajares, Alfredo Landa o Fernando Esteso corriendo en calzoncillos con expresión libidinosa tras mujeres de rubias cabelleras y exiguas ropas. Los títulos, no dejaban lugar a la imaginación: “Los energéticos”, “Los liantes”, “Los Chulos”, “Agítese antes de usarla”, “Polvos mágicos”… Uno creía esos tiempos idos para siempre, cuando vienen a explotarnos en la cara en pleno siglo XXI. ¿Cuántas veces hay que ir a un club de alterne para hacerte amigo del portero?. No conocido, no, amigo. Tan amigo como para llevártelo contigo en tu carrera política hasta elevarlo a asesor de ministro. ¿Cuántas veces?…Debes ser asiduo para llegar a ese grado de compañerismo con el portero…Asiduo de un club de alterne. ¿Qué tiene de malo?. Nada, en principio. Yo no he entrado nunca en un club de alterne, pero por las películas me parece un mundo de rijosos, libidinosos y casposos barones baboseando a señoritas que no están allí por amor al arte. ¿Y?…¿Qué pasa?…El portero puede ser un intelectual venido a menos que se gana allí la vida… Nada, si no pasa nada. Lo que impresiona no es el portero, es que el señor frecuentador de esos lugares esté tan cerca del gobierno de la nación. Esté negociando en Bruselas cómo burlar la Constitución. (Atención porteros de los antros bruselenses, se abre una magnífica oportunidad laboral). Lo grave no es el portero, hay que insistir, lo grave es el político que lo encumbra y el sistema partidario que le permite llegar donde llega. El de Navarra lo saca del club y lo hace concejal y cuando llegan al gobierno se lo encomienda a alguien que sabe que va a encajar en el prototipo. No se lo recomienda a Margarita Robles, no, se lo encomienda al mas colega, que lo encumbra a asesor de ministro y Consejero de una empresa pública de Renfe. Y el portero aprende rápido… ¿Picaresca?. No, nuestro pícaro del XVII nunca llega al poder. Esa es la diferencia. Que ahora los tenemos en los gobiernos. Que se sientan en los Consejos de Ministros o en sus cercanías. ¡Qué cachondeo me imagino que se traerían los frecuentadores de clubs de alterne cuando oyesen los discursos de sus colegas clamar contra el machismo y el patriarcado!.¡Cuántos chistes de maricas no se habrán contado entre copas y risotadas!. Pajares y Esteso en calzoncillos corriendo por los pasillos de un hotel en pos de una turista sueca…eso es lo que hay al otro lado de las tapias del muro…

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